Misiles en el tejado

"Este lugar ha sido elegido porque se encuentra cerca del Olympic Park y ofrece una visión excelente de la zona y de todo el cielo del Olympic Park", así empiezan las cartas que recibieron los habitantes y propietarios de los 5 emplazamientos elegidos para la instalación de misiles ligeros tierra-aire que el Ministerio de Defensa inglés como medida  de prevención ante un posible ataque aéreo a las instalaciones olímpicas.






Diez baterías de misiles podrían ser instaladas en el área de 10 km alrededor de el Parque Olímpico. Cada batería será custodiada por una dotación permanente de diez militares desarmados apoyados por la policía. 

Una de las azoteas londinenses donde podrían instalarse las baterías antimisiles

 "Los he mirado (los misiles) y no creo que sea algo que puedas disparar sobre una zona tan poblada como Tower Hamlets. Piensa en los restos", argumenta un joven vecino. El folleto dice que los misiles sólo se utilizarán como último recurso. "Es totalmente inadecuado", afirma. 


El dispositivo de seguridad de los juegos ha sido uno de los apartados más polémicos del proyecto, pues ya desde bastante antes de los Juegos la opinión pública inglesa quedó dividida  entre los dispuestos ha renunciar a su intimidad y algunos sus derechos para que el Gobierno y las instituciones orgánicas de los Juegos garantizasen la seguridad y los que que no lo estaban tanto. 


"Tal como se anunció antes de Navidad, se pueden instalar sistemas de defensa aérea en tierra como parte del plan de seguridad aérea para las Olimpiadas, incluidos aviones y helicópteros, que protegerán el cielo de Londres durante los Juegos", declaró el portavoz del ministerio.